viernes, 30 de noviembre de 2007

Los signos de puntuación (final).

Por Raúl Germán Bautista.
raulgerman78@yahoo.es


SANTO DOMINGO OESTE.- Los signos de puntuación, en su conjunto, son los que les dan la armonía, el brillo, el sentido a cada oración a cada párrafo.

Quien domine el uso correcto de todos ellos juntos escribirá limpio, y quien lo lea entenderá sin problemas las ideas que plasma el autor.

Pero esto no lo consiguen muchos periodistas y comunicadores porque no se aprenden las funciones y definiciones de los signos de puntuación. Ampliemos.

Los dos puntos. (Agencia EFE).

Los dos puntos (:) se utilizan:

a) para anunciar una cita literal en estilo directo:

El Presidente añadió: “El próximo jueves me reuniré con los líderes sindicales”.

La conjunción /QUE/ no puede sustituir a los dos puntos para introducir oraciones de estilo directo (error muy frecuente en los medios impresos y de la red):

El candidato advierte a su partido que “no voy a ganar ni a perder las elecciones yo solo”.
Lo correcto: El candidato advierte a su partido: “no voy a ganar ni a perder las elecciones yo solo”.
En estilo indirecto: El candidato advierte a su partido que no va a ganar las elecciones él solo.
Mejorado: El candidato advierte a su partido que no ganará las elecciones él solo.

b) Para anunciar una enumeración:

Hay dos motivos por los que voy a esa conferencia: el tema me atrae y la hora me conviene.

c) Al revés, para cerrar una enumeración y comenzar lo que ella representa:
Elecciones anticipadas, crisis económica y aumento del paro: tensión en la bolsa.

Las comillas.

Las comillas son un signo ortográfico (“i”) que se usan en los siguientes casos:

a) Para enmarcar citas textuales.
b) Para señalar una palabra de creación propia o no reconocida académicamente.
c) Para señalar palabras extranjeras no recogidas en el diccionario de la Academia, cuando el teclado no permita ponerla en cursiva.
d) Para indicar, mediante ironía, que algo debe entenderse al revés de cómo se dice:

Ejemplo de Fernando Díez Losada: “…Julio Iglesias aseguró hoy que “yo voy a ser soltero toda mi vida.” Cuando en periodismo se pretende reproducir las palabras textuales (entrecomilladas) de alguien, es conveniente utilizar el llamado estilo directo, con dos puntos (:) y sin la conjunción enunciativa QUE. Esta disposición se hace indispensable cuando la persona verbal de la oración citada verbalmente no coincide con la de la oración principal.

En el caso que comentamos, debió haberse escrito: Julio Iglesias aseguró hoy: “Yo voy a ser soltero toda mi vida.” También podría haberse redactado, en estilo indirecto, así: Julio Iglesias aseguró hoy que va a ser soltero toda su vida (mejor, digo yo: Julio Iglesias aseguró hoy que será soltero toda su vida). Pero tal y como se publicó la noticia, lo que realmente se dice es que Julio Iglesias aseguró que el redactor de la nota va a ser soltero toda su vida (?)

El guión

El guión es un signo ortográfico consistente en una rayita horizontal (-) que presenta los siguientes casos:

a) Al fin del renglón que termina con parte de una palabra, cuyo resto debe escribirse al principio del renglón siguiente. Nunca se cortará al final del renglón un diptongo ni un hiato; tampoco se acabará ni terminará un renglón con una sola letra.

b) Para unir los dos componentes de algunos adjetivos cuando ambos conservan su propio acento: cuestión teórico-práctica, elementos físicos-químicos, oraciones interrogativo-exclamativas. Para separar dos o más adjetivos que califican conjuntamente a un sustantivo: Museo Histórico-Geográfico.

c) Entre dos o más nombres propios que se juntan para indicar los partícipes de algo: pacto Perú-República Dominicana-Colombia; reunión Roosevelt-Churchill-Stanlin.

d) Los compuestos de los sustantivos del tipo coche bomba, camión cisterna, hombre rana, buque escuela, etc, deben escribirse siempre sin guión.

e) Para unir las cifras, siglas, palabras y siglas o cifras y palabras entre las cuales se omite una preposición: pasajero-kilómetro, kilómetros-hora, partido de fútbol Barcelona-Madrid, relación madre-hijo-nieto.

f) en los compuestos en que se antepone un prefijo a un nombre escrito con mayúsculas, a una sigla o a una cifra: anti-Arias, anti-OTAN, sub-15. Los prefijos, salvo en estos casos, no han de separarse con guión de la palabra siguiente. Nota: Escríbase EX unido a la base léxica en una sola palabra cuando se trate de verbos (extraer…) y adjetivos (excéntrico, excombatiente…); pero escríbase separado, pues es tónico, cuando se una a sustantivos: su ex marido, el ex ministro. En cualquier caso, cuando se trate de expresiones sustantivas finas como primer ministro, guardia civil, etc., sólo puede escribirse separado: el ex primer ministro.

g) Después del prefijo de una palabra cuando ésta queda aislada de él por la interposición de otro u otros prefijos: acuerdo bi-, tri- o cuatri- partito.

h) Entre las cifras que indican los años inicial y final de un espacio de tiempo; por ejemplo: Juan Martínez Sánchez (1902-1986); o siguiendo a la fecha que indica el principio, cuando no se ha producido aún en fin: Pedro Rodríguez Fernández (1912-).

i) entre cifras que indican las páginas en que se expone algo ininterrumpidamente: páginas 58-66.
La raya.

La raya es un signo de puntuación horizontal con trazo más largo que el del guión. Se usa en los siguientes casos:

a) Para aislar palabras o enunciados incidentales o aclaratorios. En este caso, el uso de la raya frecuentemente equivale al del paréntesis.

La guerra, si es que Estados Unidos no lo impide----y no parece que vaya a hacerlo----se nos antoja inevitable.

b) para indicar el cambio de interlocutor en un diálogo o en una entrevista.

c) Para suplir al principio de la línea o párrafo, en índices, bibliografías y otros escritos, la palabra o nombre propio con que empieza otra línea u otro párrafo anterior.

Seco, Manuel, Diccionario de dudas y dificultades de la lengua española, Madrid, Espasa-Calpe, 1996.
-----Gramática esencial del español, Madrid, Espasa-Calpe, 1989.

El paréntesis y corchetes.

Los signos llamados paréntesis ( ) son dos: el de apertura y el de cierre. Se utilizan:

a) Para encerrar comentarios marginales, incisos o aclaraciones que interrumpen el discurso:

El torero (había cortado cuatro orejas) salió por la puerta grande.
El ministro (parecía disgustado) comentó que no iba a permitir otros altercados de ese tipo.
b) Para enmarcar explicaciones de siglas, acrónimos, periodos de años, fechas y algunos topónimos (nombre propio de un lugar) cuando forman parte de una unidad mayor, aunque en este último caso el uso hispanoamericano la simple coma:

ONG (Organización no Gubernamental).
Segunda Guerra Mundial (1939-1945).
Córdoba (Argentina).
Córdoba, Argentina.

c) Para enmarcar los puntos suspensivos que indican suspensión de un fragmento de un texto en una cita. También pueden usarse los corchetes. Cuando hay paréntesis, los signos de puntuación detrás y nunca delante. El corchete es un signo con usos muy parecidos a los del paréntesis.

2.4.6 El punto y coma.

El punto y coma (;) marca una pausa mayor que la coma y menor que el punto; supone un tono descendente como en del punto.

a) Normalmente, va detrás de fragmentos de oración que poseen una autonomía superior a la que marca la coma.

Quienes conducen sin respetar las señales de tráfico, saltándose los semáforos; quienes jamás se detienen ante los pasos de cebra; los que estiman que el coche les otorga superioridad sobre los peatones; los que insultan a quien hace uso de sus derechos en la calle o reprende su mal comportamiento, son ejemplares muy peligrosos de la moderna fauna ciudadana.

b) Separa oraciones completas íntimamente relacionadas y de cierta extensión (porque, si fueran cortas, se separarían con comas).

Hay diversos tipos de escritores: los que persiguen el éxito a toda costa halagando los gustos del público; los que tratan de imponer su gusto haciéndose con un público fiel; por último, los que escriben sin tener en cuenta los gustos del público.

c) Especialmente, frecuente es la necesidad de emplear el punto y coma para separar enunciados donde hay ya comas; véanse los ejemplos anteriores y este otro:

El público, acabado el mitin, inició la salida; en lugar de entusiasmo, mostraba decepción.

d) En todo periodo se pondrá punto y coma delante de las locuciones adverbiales sin embargo, no obstante y de las locuciones conjuntivas así que, por tanto, por consiguiente…
Además, si el periodo tiene una cierta extensión, también se puede poner punto y coma delante de las conjunciones mas, pero y aunque.

Ya hemos trabajado mucho; así que merecemos un descanso.
En el partido hubo goles; sin embargo, el público no salió contento.
Salieron los soldados a media noche y anduvieron nueve horas sin descansar; pero el mal estado de los caminos malogró la empresa.

El punto.

Se distinguen tres clases de puntos:

a) Punto y seguido. Este signo separa, dentro de un párrafo, enunciados con mayor autonomía lógica que el punto y coma:

Al caer la tarde, volvieron al hotel. El portero les entregó el telegrama, y quedaron estupefactos. Hicieron las maletas, pidieron un taxi y salieron rápidamente hacia la estación.

b) Punto y aparte. Este signo separa los párrafos.
c) Punto final. Este signo cierra textos. (Es incorrecto decir punto y final).



3 comentarios:

Anónimo dijo...

Gracias me sirvió de mucho tu información de la puntuación.

Flor dijo...

hola la informacion me sirvio de mucho, esta muy completa y sencilla y entendible.

Anónimo dijo...

hola!!mi nombre es Victor y vivo en el estado de C.A.(EUA).Gracias por compartir tus conocimientos sobres los signos de puntuacion son de gran ayuda.Dios te bendiga!!!